lunes, 15 de noviembre de 2010

una mañana inadvertida

Nuevamente el chico limpió hasta dejar todo reluciente, subió hasta el tercer piso hacia la primera habitación de la izquierda. En esa alcoba solamente habían columnas de papeles por todas partes, la habitación estaba repleta el chico suspiro y dijo - sabía que durante estos años debía trabajar, ¡uf! cuantos informes, arreglar esta mansión fue sumamente mas sencillo.. mmm...  tendré que empezar.
Cerrando la puerta se quedó allí, 4 horas después una mujer con un vestido rojo con un hermoso escote, cabello naranja rojizo (el cabello parecía fuego) entro con una bolsa de comida por la puerta principal, quedando asombrada de ver la limpieza; - ¿sera posible...? ¿él ha regresado? Se tardó en regresar, debe estar en su cuarto haciendo papeleo, le agradara si le preparo el almuerzo, aunque ya sean las 2 de la tarde

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